Os presentamos a nuestra joven inspiradora Irene, creadora del grupo R&B Act as you feel.
Desde que era pequeña, Irene se ha sentido muy conectada con la naturaleza y ha hecho todo lo posible por transmitir esa conexión a su entorno para intentar mejorar la vida de las personas, los animales y el medio ambiente.
De ese impulso innato por cambiar las cosas y su enorme imaginación nació “Act as you feel”, el grupo Raíces & Brotes que creó junto a su hermana Clara para luchar por los derechos de los animales y la protección de la biodiversidad y todos los ecosistemas que nos rodean.
Desde entonces, Irene no ha dejado de idear proyectos como “Ocean diversity”, “the EARTH is US” o “SOUL”, iniciativas originales que tienen en común el objetivo de despertar en las personas esa pasión por reconectar con la naturaleza y los animales para conocerlos mejor, quererlos y respetarlos.
“No debemos olvidar que todos los seres vivos dibujamos un único equilibrio, la enorme diversidad que nos diferencia hace posible que todos existamos. Más que nunca necesitamos reconectarnos con el mundo natural y vivir en relación con los océanos, la naturaleza y los animales. Ahora es la oportunidad de despertar y cambiar antes de que sea demasiado tarde”, asegura.
Por todo ello, Irene es una de nuestras jóvenes inspiradoras y hoy la entrevistamos para conocer un poco mejor a ella, su grupo R&B Act as you feel y todos los maravillosos proyectos que llevan a cabo.
- ¿Cómo empezaste a preocuparte por la conservación de la naturaleza?
Siempre me he sentido muy conectada a la naturaleza. Soy una persona muy sensible y empática con todo lo que hay a mi alrededor. Las personas, los animales y los hábitats naturales que forman este gran ecosistema me importan muchísimo, me siento conectada y comprometida con ellos.
Mi llamada a la acción fue con una obra de teatro que creé e interpreté para clases de tercero y cuarto de primaria sobre la contaminación por plásticos y los animales marinos. Combinando los océanos que cubren nuestro planeta con el arte, mostré cómo la contaminación plástica está acabando con la vida de los animales marinos. Yo interpretaba a una tortuga marina y, junto a otros seres vivos, me deshacía de las densas capas de microplásticos que nos asfixiaban. Me hizo despertar al mundo que había frente a mí y me llenó de fuerza, apoyo y unas ganas imparables de cambiar el mundo.
- ¿Qué problemáticas ambientales son las que más te preocupan?
Estoy profundamente preocupada por la biodiversidad que desaparece cada día, el sufrimiento de los animales y cómo les afecta que talemos los árboles en la tierra y los arrecifes que decoloramos al aumentar la temperatura del mar. Hoy en día existen más microplásticos en los océanos que estrellas en la Vía Láctea y hemos hecho desaparecer del Amazonas miles de distintos animales y plantas hasta que ha llegado a emitir más CO2 del que puede absorber. Se están derritiendo los dos polos y estamos conduciendo a miles de especies a la extinción. Los océanos se vuelven más ácidos, el mundo está en llamas… Encendamos la llama de la acción, alcémonos como los océanos.
- ¿Tu entorno comparte tus inquietudes?
A mi hermana y a mis padres les preocupa mucho la gran pérdida de biodiversidad, el cambio climático y la contaminación que está destruyendo nuestro planeta. Por eso, intentamos que nuestras acciones sean lo más sostenibles posibles. Desde que tenía 12 años he impartido talleres sobre consumo sostenible y responsable, justicia social, contra la violencia… También he cantado por la igualdad de género y la emergencia climática, he bailado en flashmobs por la no violencia y he asistido a marchas contra el plástico. Entre toda la gente a la que intentas sensibilizar, a mucha no le importa ni le preocupa lo más mínimo. Pero creando conciencia podemos abrir los ojos de muchos y juntos hacer el cambio.
- Para concienciar creaste un proyecto de educación animal y ambiental, SOUL. Cuéntanos más de él.
SOUL consiste en diversas actividades, talleres, Bee Kind Actions y recursos de aprendizaje que están interconectados para marcar una diferencia entre todos en el mundo que compartimos, formado por bosques, océanos y miles de animales sin los que nuestro planeta no existiría de la manera en la que lo conocemos.
Su objetivo es educar, concienciar, sensibilizar, conectar y acercarnos cada vez más al mundo natural. Emprender un plan de acción en el que empatizar, descubrir la biodiversidad y actuar directamente para hacer de este mundo un lugar mejor. Porque necesitamos y debemos salvar nuestro planeta con todos los animales que viven en él.
- También tienes un proyecto para proteger a los océanos, ¿verdad?
Sí, Ocean diversity. Fue el primer proyecto que creé para proteger a los animales marinos y al océano de la contaminación plástica, los efectos del cambio climático, la sobrepesca y la acidificación, y así ayudar a las tortugas marinas, los arrecifes de coral, las focas, los delfines… A través del proyecto, les invito a aprender más sobre los animales marinos en mi página web y a emprender acciones en Oceanly, una plataforma dedicada a crear una ola de cambio por el océano.
- Y tu proyecto EARTH is US, ¿en qué consiste?
Está enfocado en concienciar y actuar frente a la pérdida de biodiversidad, la extinción de especies, la deforestación y en ayudar a proteger los ecosistemas terrestres. A través de la creación de contenido divulgativo en mis redes sociales y otros medios, sensibilizo e intento marcar la diferencia por los gorilas, elefantes, bonobos y orangutanes, junto a una plataforma de cambio con guías de acción para todos: Earthly.
- También has creado tu propio grupo Raíces & Brotes Act as you feel. ¿Qué fue lo que hizo que te decidieras a crearlo?
El ser consciente de que los océanos se están destruyendo, las especies están desapareciendo y los animales y las personas estamos sufriendo me impulsa a hacer algo para intentar arreglarlo. Creo que desde el primer momento que vemos algo que admiramos, que amamos, que nos importa y que es vital para nosotros, sentimos la necesidad de luchar por ello. Eso es lo que me ha pasado a mí.
- ¿Cómo conociste a la Dra. Jane Goodall?
No recuerdo cuándo fue la primera vez que oí hablar de ella, pero el hecho de que hubiese vivido en la selva, rodeada de animales, y de que hubiese formado un vínculo tan especial con ellos es admirable para mí. Me conmovió cómo cambió la manera en la que vemos al resto de animales y me ha acercado mucho a los grandes simios hasta impulsarme a actuar por salvarles con mi campaña #FreeWildGreatApes en change.org. Es una iniciativa por la libertad de chimpancés, gorilas, orangutanes y bonobos, para acabar con su compra, cría en cautiverio y tráfico ilegal, por el fin de su cautividad en zoológicos de nuestro país.
- ¿Por qué es importante esta campaña?
Los grandes simios son seres con emociones y sentimientos que sufren alejados de sus congéneres, privados de su libertad; ningún animal merece vivir en un zoológico. Esa línea que nos separa del resto de especies no existe, nos atrevemos a transformar vidas en mercancía y entretenimiento a cambio de dinero. España no es una excepción. Aún hay zoológicos aquí que no cumplen las mínimas leyes que existen de protección de estos animales. La situación actual de los zoos en España es de las peores de Europa. Muchos grandes simios en zoológicos españoles viven en un estado no ético, que les causa mucho sufrimiento, trastornos psicológicos, comportamientos antinaturales y estereotipias como el balanceo constante y la automutilación.
Cada uno de ellos importa. Necesitan rehabilitarse psicológicamente, recuperar sus instintos y volver a adaptarse a su propio entorno natural en el lugar más cercano que existe a la libertad para ellos, un santuario. Por eso, hay que partir desde el momento en el que este ciclo de sufrimiento se inicia. La campaña tiene ya casi 50.000 firmas.
- Además de impulsarte a lanzar esta campaña, ¿qué te sorprendió de la Dra. Jane Goodall cuando la descubriste?
Lo que más me inspiró fue el mensaje que nos transmite, a través de toda una vida luchando por los seres vivos con los que compartimos nuestro único hogar y viendo horizontes más allá de las fronteras que habíamos dibujado. Me impresionó su espíritu indomable y lleno de esperanza que nunca se ha rendido.
- ¿Qué le preguntarías si tuvieras la oportunidad?
Nunca podría imaginarme hablando con Jane Goodall, aunque sería increíble, pero mi pregunta sería: ¿cómo podemos hacer que las personas seamos más empáticas con los animales, el mundo natural y nosotros mismos? Es extremadamente urgente que arreglemos la manera en la que nos vemos y tratamos los unos a los otros, potenciar el amor en vez del odio. Ahora podemos actuar con una mirada interseccional, feminista, antirracista, aliada de las personas LGTBQIA+ y animalista.
El empeño de Irene por cambiar las cosas no desiste. Por eso, ahora está en medio del proceso creativo de un nuevo proyecto, OLA, inspirado en el arte y la naturaleza del ser porque, para ella, “el arte es la mejor forma de mostrar y expresar lo que sentimos, de alzar la voz. Somos arte, somos cambio, somos olas”.
Al preguntarle qué le diría a alguien para animarle a unirse o a formar un grupo R&B, no se lo piensa: “Da igual dónde vivas o quién seas, siempre hay un lugar para ti y puedes crearlo por ti mismo, convirtiendo pequeños pasos en un viaje en el que poco a poco, incluso sin darte cuenta, vas a cambiar el mundo. Siente, piensa y actúa. Nuestro planeta azul te necesita y tú le necesitas a él, somos lo mismo”.
Gracias, Irene, por tu increíble ambición por cambiar el mundo y por tu perseverancia para compartir con los demás tu pasión por la naturaleza con el fin de que más personas aprendan también a quererla y respetarla.
Si nuestra joven inspiradora te ha motivado a pasar a la acción, no te lo pienses más: ¡Únete a nosotr@s y marca la diferencia!
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