Se llama Miguel Nicolás Gallego Alcalá, está a punto de cumplir los 10 años y ya ha creado su propio grupo Raíces y Brotes, "R&B Feliznos". Su propósito: encontrar un hogar a los 17 gatos callejeros que viven en el parque de su barrio en Albacete y que ahora es una colonia controlada por el Ayuntamiento.
Miguel se confiesa amante de todos los animales, “aunque sean leones o mosquitos”. Desde bien pequeño ha tenido pasión por los animales. Su madre cuenta que siendo bebé ya acercaba su frente a la cabeza de todos los perros y gatos que tenía cerca.
Todo comenzó cuando Miguel tenía 3 años y descubrió a los gatos del Parque de los Cuentos. Decidió ayudarles construyendo casas de cartón cubiertas con camisetas. Sin embargo, un día al volver del colegio, vió como una barrendera estaba rompiendo todas las casas, Miguel rompió a llorar y preguntó a su madre qué podían hacer. Su madre le respondió que escribiera a Jane Goodall pidiéndole ayuda. Fue el primer email que escribió en su vida.
Miguel da de comer a algunos de los gatos del Parque de los Cuentos
Recientemente has formado tu propio grupo Raíces y Brotes, Feliznos, como consecuencia de tu implicación en la asociación Dejando Huella, que se dedica a cuidar animales abandonados. ¿En qué consiste tu proyecto y quiénes formáis parte del grupo?
Buscamos que las personas adopten a los gatos del Parque de los Cuentos para que no vivan en la calle. Raíces y Brotes Feliznos lo formamos Paula, Álvaro, Icíar, Noa y mi hermano Felipe.
Decidir formar tu propio grupo R&S no ha debido ser sencillo. ¿Por qué decidiste empezarlo y cómo animarías a todos aquellos que quieren ayudar a los animales,
pero no saben cómo?
Quería defender a todos los gatos que vivían solos en el parque. Animaría a las personas que quieres ayudar a los gatos enseñándoles cómo de buenos pueden ser, cómo cazan moscas y mosquitos.
Echando un vistazo al futuro, ¿Cómo ves tú iniciativa en cinco años?
Mis amigos seguirán queriendo a los animales. Y los gatos… algunos morirán porque viven en la calle y hace frío. Ojalá no murieran y ojala las personas los adoptaran. Si mis padres me dejaran, acogería todos los gatos del parque.
A tu edad has llegado más lejos que muchas personas adultas. ¿Qué opinan tu familia y amigos?
Mi familia opina que está muy bien lo que hago por unos gatos que están en la calle, que están infectados, malos y con bacterias. Mis amigos también lo ven bien y me animan. Mi abuelo lo ve genial porque le gustan mucho los gatos.
Eres un gran admirador de la Dra. Jane Goodall y el Instituto Jane Goodall fue, en parte, el impulsor de tu iniciativa cuando respondió a tu email pidiendo ayuda. ¿Qué es lo que más te inspira de ella?¿Qué mensaje te gustaría transmitirle?
A ella le gustan los animales, igual que a mi, y los defiende. Los monos les tienen miedo a todas las personas, pero a Jane Goodall no. Con ella se sienten bien. Le diría que viniera a mi casa a ver a mi gata Michi, que pesa 9 kg, y la llevaría a conocer a los gatos del parque.
¿Un sueño que deseas cumplir?
Que las personas no abandonaran a ningún animal ni hubiera animales viviendo en la calle. Y conocer a Jane Goodall Estaría muy emocionado de conocerla porque es mi heroína.
También tuviste la oportunidad de conocer a Rebeca Atencia, veterinaria que dirige la oficina del IJG en el Congo desde hace más de una década. ¿Qué sentiste al conocerla?
Muchísima emoción porque a ella también le gustan los animales igual que a Jane Goodall, Además es veterinaria como mi padre.
Si echamos la vista hacia delante, ¿cómo te ves en un futuro?
Voy a ser veterinario de gatos y de todos los animales.
¿Tu frase favorita?
“Un gato puede ser más importante que una gallina”.